¿CONOCES LA LEY DE IGUALDAD ?


 ¿CONOCES LA LEY DE IGUALDAD DE GENERO?





La conocida como Ley de Igualdad de Género, que pronto cumplirá 11 años, fue un notable avance en la lucha por la igualdad, ya que España se adaptó a la normativa europea e internacional, asumiendo como propios principios basados en los derechos humanos. Una ley de igualdad ofrece seguridad jurídica a las mujeres, pues abre la posibilidad de denunciar ante la Justicia situaciones de violencia, discriminación y abuso.
La propia ley advierte que es necesaria una acción normativa, es decir, el desarrollo de leyes específicas y reglamentos que permitan combatir toda clase de discriminación por razón de sexo en cualquier ámbito social, laboral, económico e incluso institucional.
Su validez alcanza a toda persona física o jurídica que se encuentre en España y su aplicación es de obligado cumplimiento para cualquier institución del Estado: desde los Ministerios hasta las Comunidades Autónomas y Ayuntamientos.

La ley de igualdad de género ha significado el reconocimiento jurídico de un principio básico en una sociedad democrática. Sin esta ley, el camino por recorrer para alcanzar la igualdad real sería, sin duda, mucho más largo. No cabe duda de que todavía existen numerosos obstáculos para las mujeres y que la igualdad no existe en todos los ámbitos de la sociedad. Sin embargo, algo que sí ha conseguido el movimiento feminista, y también la aprobación de la ley de igualdad, ha sido que la propia sociedad vaya incorporando la perspectiva de género. Poco a poco, sin prisa pero sin pausa, la conciencia social ; está entendiendo que hombres y mujeres tenemos los mismos derechos.

Algunas medidas concretas

Dentro del marco normativo de la Ley de Igualdad para promover la equidad entre géneros, se tomaron en consideración distintas medidas concretas que se establecieron como garantía del cumplimiento de la propia Ley.
Para destacar:
Derecho a la conciliación familiar y laboral: Que la mujer no se vea discriminada en el trabajo por cuidados familiares, se establecieron protocolos y permisos especiales para el cuidado de hijos, entre los que destaca el permiso de paternidad. Aunque este fue uno de los más claros estandartes de la Ley, sigue siendo mucho más escueto que el de maternidad. Se perseguía con ello una corresponsabilidad entre mujeres y hombres en la asunción de obligaciones familiares.
Establecimiento de un Plan Estratégico de Igualdad de Oportunidades, con el que los poderes públicos se erigían como principales garantes de los objetivos de la Ley de Igualdad.
Obligación de establecer planes de igualdad a las empresas de más de 200 trabajadores, entrando con ello en el plano privado.
Implantación de una igualdad efectiva en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y en las Fuerzas Armadas.
Provisión de puestos de trabajo para mujeres en el seno de la Administración General del Estado.
Paridad en las listas electorales, una medida que, a pesar de sus intenciones, ha sido frecuentemente criticada.
Creación del Ministerio de Igualdad: aunque no se establecía específicamente en la Ley, se creó como estructura pública transversal para la gestión de las acciones de la normativa.